Aprovechemos las muchas oportunidades que tiene el país en tecnología y tracemos el camino a seguir para potenciar su beneficio a nuestros sectores productivos, laborales y sociales. Preparémonos como país en los diversos niveles, incluyendo legal y de política pública, tal y como explica este comentario.
Aprendamos lo que convenga de los casos exitosos de economías como la de Singapur, catalogadas como “milagros económicos”. Hablamos de un ejemplo a nivel mundial en recuperación y en donde se demuestra que los cambios son posibles si hay voluntad política.
Trabajemos y convirtamos a Costa Rica en un milagro, en una potencia tecnológica, con la participación de la academia, sectores productivos e instituciones públicas. Que existan un día cientos de grandes empresas tecnológicas costarricenses y seamos un eficiente polo de atracción de inversiones en Tecnologías de Información y Telecomunicaciones. Industria que, según el Foro Económico Mundial, arroja una de las más altas tasas de crecimiento, de más de un 40% anual.